Conmigo no, Macri

La Asociación Gremial de Trabajadores de Subterráneos y el Premetro decidió liberar los molinetes de todas las cabeceras de subterráneos en reclamo al aumento de tarifa de 1.10 a 2.50 pesos, que decidió el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a sólo 48 horas de recibir el traspaso por parte del Gobierno Nacional.

Obviamente lo que defienden, en estos casos los delegados de Subtes, no es directamente a los trabajadores sino que la medida es “en solidaridad con los usuarios”, según manifestó Néstor Segovia, el delegado de la línea C.

Asimismo, los legisladores porteños de la oposición y distintas asociaciones de consumidores presentarán conjuntamente un pedido de amparo para frenar el aumento que rige a partir de hoy. El mismo se decidió sin audiencia pública, como así también sin prever informar qué obras de infraestructura contemplarán los nuevos fondos.

Sin embargo, lo que más molesta es la gestión simplista del jefe de Gobierno de la Ciudad, que veta las leyes que no les gusta como la ley 4008, que contempla una prórroga hasta el 2017 de la protección a una veintena de fábricas recuperadas por sus trabajadores, en las que se desempeñan en la actualidad más de 2 mil personas, o bien la ley que prohibía la venta de medicamentos en góndolas, kioscos y bares de la Ciudad de Buenos Aires. o la ley que crea un Registro de Cuidadores de Vehículos, mediante la cual se pretendía regular la actividad de los llamados “trapitos”. Por otro lado, el jefe de Gobierno no tiene inconvenientes en aumentar el ABL sin discutirlo ni con sus propios legisladores.

El sin razón del gobierno de Macri se transparenta. Es necesario discutir a quién afecta el aumento antes de tomar una decisión como tal. El ministro de Hacienda porteño, Néstor Grindetti, admitió “Como nosotros no tenemos partida presupuestaria para agregar a la otra mitad del subsidio de la Nación, teníamos que complementarlo con el ajuste de tarifas”.

Sólo se debe obtener un 50 % del ingreso que se deja de recibir como subsidio del PEN y, como consecuencia, se aumenta. Razones no van a faltar, el precio del boleto hace tiempo que se mantuvo, aunque los índices inflacionarios fueron elevados como para dejar el precio del boleto al mismo valor. Nunca un análisis, nunca una idea renovadora, siempre la opción simplista, el ajuste. Grindetti indicó “lo primero que vimos fue un evidente retraso de la cuota respecto de la inflación”

Algunos datos:

-       El 50 por ciento del subsidio que debería aportar el gobierno porteño, que equivale a 360 millones de pesos,

-       360 M representa el 1,2 por ciento de los ingresos anuales de la Ciudad establecidos en el Presupuesto.

-       Casi 1 millón de usuarios utilizan diariamente el servicio de subterráneos.

-       Los sueldos de los trabajadores del subterráneo van de 2 mil a 4.6 mil pesos en promedio.

-       Metrovías recauda anualmente $ 950 Millones  y paga por salarios -cargas incluidas- por $ 283,6 Millones

-       La línea A tiene coches “La Brugeoise” 1913 utilizados actualmente por más de 200 usuarios diarios.

-       Metrovías requirió subsidios por $2 M diarios en el 2011

-       Metrovías repartió ganancias por $150 M entre sus accionistas

-       El precio actual del pasaje es de $1.10 y se iría a $2.50 representa el 127 % de aumento

A todo esto y preocupado por la situación Mauricio Macri demostraba el valor del ejercicio cotidiano y se enfrentaba en un partido de futsal en un complejo deportivo de Mar del Plata con el gobernador bonaerense Daniel Scioli. 

La pregunta es, si los votantes porteños lograrán visualizar, en las próximas elecciones, el verdadero rol que debe tener un Estado, como actor presente, o tener que recordar cotidiana y inexplicablemente las políticas liberales de los noventas, que nos llevaron a la profunda crisis a principios de la década pasada.